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lunes, 4 de enero de 2010

Egoista

Sí, la verdad es que mi mensaje anterior suena egoista después de leer las noticias. Así que me propongo hacer un pequeño homenaje, a todas esas personas que lo han pasado muchísimo peor el pasado año, y que tienen más razones que yo para querer olvidarlo.
Emnpezemos por las 55 mujeres asesinadas el pasado año.
24 de enero. Marta, 17 años
5 de febrero. Ana, 25 años
10 de febrero. Silvia, 30 años
20 de febrero. Rosa, 35 años
20 de febrero. Lola, 35 años
6 de marzo. Nieves, 65 años
15 de marzo. Paula, 26 años
26 de febrero. Mercedes, 55 años
20 de marzo. Inés, 39 años
22 de marzo. Andrea, 44 años
24 de marzo. Nuria, 44 años
10 de abril. Manuela, 54 años
9 de mayo. Lisbeth, 37 años
12 de mayo. Fátima, 30 años
12 de mayo. Lucía, 45 años
20 de mayo. Elena, 34 años
20 de mayo. Virginia, 42 años
26 de mayo. Li, 23 años
27 de mayo. Rocío, 36 años
29 de mayo. Christine, 20 años
31 de mayo. Ángela, 20 años
3 de junio. Carmen, 30 años
13 de junio. Victoria,80 años
14 de junio. Beatriz, 35 años
15 de junio. Marta, 55 años
20 de junio. Patricia, 22 años
1 de julio. Lourdes, 58 años
15 de julio. Miriam, 23 años
16 de julio. Soraya, 38 años
25 de julio. Yolanda, 33 años
28 de julio. Isabel, 48 años
28 de julio. Luz, 52 años
3 de agosto. Blanca, 66 años
24 de agosto. Laura Alonso,19 años
7 de agosto. Remedios, 70 años
25 de agosto. Sara, 22 años
30 de agosto. Celia, 42 años
3 de septiembre. Ana, 45 años
6 de septiembre. Susana, 33 años
7 de septiembre. Esther, 30 años
12 de septiembre. Mónica, 31 años
16 de septiembre. Yanelis, 25 años
22 de septiembre. Lidia, 32 años
4 de octubre. Olga, 48 años
4 de octubre. Julie, 55 años
9 de octubre. Laia, 40 años
12 de octubre. Carolina, 35 años
16 de octubre. Irene, 26 años
23 de octubre. Rosario, 61 años
3 de diciembre. Luisa, 67 años
3 de diciembre. Estela, 19 años
14 de diciembre. Trinidad, 80 años
24 de diciembre. Neila, 42 años
28 de diciembre. Julia, 24 años
No están todas, porque recuerdo el caso de una niña de 14 años en Vallecas, asesinada por el novio de una familiar.
También rindo homenaje a los héroes anónimos que sin pensar en su propia seguridad, no se lo piensan dos veces para salvar la vida de alguien en plena calle. (Antoñito, va por ti)

¡¡¡FELIZ 2010!!!

Hola amigos del ciberespacio.
Antetodo desearos un feliz y próspero año nuevo, y también volver a pedir disculpas a mis seguidores (si es que todavía me queda alguno) por este laaaaaargo parón.
Me gustaría celebrar con vosotros, más que la llegada de un nuevo año, dar carpetazo al año anterior. Sé que la mayoría estará de acuerdo en que ha sido un año fatídico. Mi propósito para este año es cerrar la puerta por la que ha salido el maldito año, llenarla de cerrojos y tapiarla para que no vuelva. Y para ello sólo me queda un frente abierto, que es el tema de laboral. Así que aún me queda algún ladrillo que otro por poner, y no son fáciles no...
¿Cuáles son vuestros propositos?

miércoles, 5 de agosto de 2009

Depresión...

Bueno, que no se diga que no lo he intentado. El lunes lo pasé completo, pero ayer me vine abajo. Me undí un poquito cuando me llamaron para decirme la fecha y la hora del acto de conciliación, que yo esperaba que fuera pronto sí, pero cuando me dijeron que iba a ser mañana, me puse muy nerviosa. Después recibí un mensaje de mi marido dicíendome lo que había cobrado... y ahí ya caí del todo.
Así que me fui primero a la mutua de trabajo, pero allí ni siquiera me atendieron, diciéndome que esto no es un accidente laboral y que fuera al médico de la seguridad social.
Así que allí he ido hoy, donde me han dado mis ansiolíticos, mis antidepresivos, y una baja de una semana, ya que mi doctora dice que estas bajas son contraproducentes, ya que luego cuesta más incorporarse al puesto de trabajo. ¡¡¿¿MAS??!!
Pues nada, seguiré informando entre sofocón y sofocón..

lunes, 3 de agosto de 2009

Primer dia...

Hola a todos.
Sí, ya sé que suena a excusa, pero de verdad que en estos días no me apetecía nada de nada, ni escribir, ni casi leer... "amos" que he estado hecha un trapo.
Hoy ha sido el primer día de trabajo después de la suspensión, y la verdad es que no sabía si iba a aguantar la jornada. Parte de mis 100 km. de camino hasta el trabajo los he hecho llorando (menos mal que no conduzco yo) y también he llorado antes de entrar cuando alguna de mis compañeras se han acercado para preguntarme qué tal estaba. Pero me he comido mi orgullo y he conseguido entrar en la oficina sin derramar una lágrima (como una persona mayor). La verdad es que al final el dia ha sido bastante tranquilo, nos hemos ignorado mutuamente y santas pascuas.
Me han comentado que allí la citación para el acto de conciliación debió de llegar el viernes, ya que después de que llegara el cartero hubo una minireunión de los dos jefes y la encargada, y que se pusieron así como muy serios. Y a mi me ha llegado hoy, pero como ya estaba trabajando he dejado encargado que mañana me la vayan a recoger (hay mi Loli, qué maja es), y bueno a ver para qué día es. La verdad es que cuanto antes mejor.
Lo que más increible me parece es que alguna gente se ha extrañado de que haya puesto una denuncia... ¿Es que alguno de vosotros se habría quedado de brazos cruzados? No sé si es que algunos son tontos, o que todos esperaban que yo fuera tonta toda la vida...
Bueno, pues lo dicho... seguiré informando.
No me voy sin antes agradecer a quien me ha mostrado su apoyo. Muchas gracias.

miércoles, 22 de julio de 2009

Al teclado, un elemento subversivo.

Hola amigos!
Aquí ando, de nuevo con unos días libres, ya que como leéis arriba soy un elemento subversivo y me han suspendido 14 días sin empleo y sueldo...
La verdad es que más que elemento subversivo, me considero más un elemento imbécil, y más simple que el asa de un cubo.
Me habéis leido hablar de mi oficina, y de los problemas que había, y me habéis leido defender a mi jefe, como llevo haciéndolo casi cuatro años. He seguido defendiéndole aún viendo que me estaba puteando (no pienso buscar otra palabra para definirlo, porque es la adecuada) hasta tal punto de decirle a mi marido que no sabía si estaba ya esquizofrénica perdida o padecía del síndrome de estocolmo...
En fin, el caso es que el viernes, por tercera vez, le quise pedir explicaciones de porqué me había cambiado de puesto de trabajo (bajando mi sueldo en unos 200 euros mínimo, sin la intención siquiera de que me volviera a poner en el mismo puesto, si no simplemente para saber la razón, ya que me había dado dos explicaciones y ninguna de las dos me parecía válida. El caso es que este "señor", con el que he comido varias veces, y he salido de copas y de conciertos, y que me consideraba "algo más que una empleada", se puso a pegarme voces, diciéndome que a ver si me enteraba de que en esta oficina se hacía lo que a él le salía de los cojones, y que si no me gustaba me buscara otra cosa. Después de una relación de amistad, podéis imaginar como me quedó el cuerpo, así que al ver que sólo iba a recibir voces, y que no me quería escuchar, di la conversación por terminada y volvimos a entrar en la oficina.
Cuando volví a sentarme en mi sitio, volví a levantarme y fui hacia él para decirle que lo que me había dicho en el pasillo, hiciera el favor de ponérmelo por escrito. El me contestó, de malas maneras, que si quería que me escribiera que yo había sido contratada para tal tarea, y que si no me gustaba que me fuera, y yo le dije que no, que que lo que me había dicho de los cojones, y me fui a mi sitio.
El caso es que a las tres de la tarde, cuando ya estaba fichando todo el mundo para irse, viene hacia mi con la carta de suspensión de empleo y sueldo. Fue tal mi no sé, dejémoslo en cabreo, que no quise ni leerla ni cojerla. Sólo quería salir de allí para no llorar en la oficina.
El lunes tuve que volver a por ella, porque en CCOO me dijeron que era importantísimo que la llevara, y la verdad que cuando fui a recogerla y la leí antes de firmarla (como no conforme, por supuesto) no sabía que hacer, si reir o llorar, porque nada de lo que pone en la carta es verdad.
En CCOO parece que lo ven bastante claro, y parece que lo peor que puede salir del juicio es que me reduzcan la sanción a 2 ó 3 días, ya que sin haber tenido nunca en toda mi vida laboral una sanción, ésta es excesiva, y que me lo tome como unas vacaciones. Y mira que lo intento, pero no hago más que pensar en el día que me tenga que incorporar, las caras que voy a tener que aguantar, y la verdad es que si no me apetecía ya antes, imagináos ahora...
Mi marido claro está totalmente de mi parte, y me apoya plenamente, no hace más que decirme que esa carta es una coacción y un abuso de autoridad. Pero a mi lo que más me fastidia no es el abuso de autoridad, son muchos años trabajando y quizá a eso esté acostumbrada, lo que más me duele es el "abuso de confianza" y eso ni si puede denunciar ni se puede indemnizar.
Bueno, pues esperando la carta de la citación estoy... seguiré informando.

sábado, 27 de junio de 2009

¡Volví!

Hola gente!!
Espero que me sepáis perdonar por estar tanto tiempo sin aparcer por aquí, pero puedo asegurar que he tenido mis razones, aunque son demasiado personales y no las voy a contar, lo siento.
Pero si que os voy a deci que ¡ESTOY DE VACACIONES! No es para dar envidia, enserio, ya que para mi el estar de vacaciones simplemente significa dejar de levantarme a las 5 de la mañana por unos días, nada de playita ni nada por el estilo. Además estas vacaciones las pedí en estas fechas para poder estar con mi niña, que se supone que la tenían que haber operado de la rodilla el jueves, pero se ha tenido que retrasar hasta nueva orden, y ponerla en tratamiento (supongo que por lo bien que se alimenta la jodía) ahora sólo queda esperar que todo vaya rapidito y la operen dentro de estos 15 días...
En el tema laboral pues todo igual... de mal. No sé si es porque les resulta caro despedirme y están esperando que me vaya yo o qué, el caso es que la cosa va a peor, bueno, lo último es que me han "degradado", me han cambiado de puesto y ahora vengo a cobrar unos 250 o 300 euros menos, se supone que es temporal, pero si la cosa no cambia no sé lo que voy a tener que hacer.
Bueno, y como una de las cosas que sí que sé que tengo que hacer es dar un giro a mi vida, he empezado por aprender a conducir, si señores y señoras, me voy a sacar el carnet de conducir, pero no os preocupéis, pondré mis horarios para que todo el mundo pueda buscar refugio cuando salga motorizada, jajaja.
Bueno ya seguiré contando.

viernes, 1 de mayo de 2009

Los mártires de Chicago

¿Qué se conmemora el 1º de mayo?

El 1º de mayo se celebra el Día Internacional del Trabajo. En muchos países se realizan grandes desfiles o manifestaciones de organizaciones laborales y de trabajadores independientes. En algunas naciones la celebración oficial del 1º de mayo sirve como “termómetro” para medir la relación entre las organizaciones laborales y el gobierno, según el poder de convocatoria que tenga el Estado. Pero, ¿sabías que esta conmemoración tiene su origen en un episodio de la historia laboral norteamericana?. 

La Jornada laboral de ocho horas

La historia de los “mártires de Chicago” comienza en una convención trabajadores en 1884. En esa convención, la Federación llamó a los trabajadores a luchar por la jornada laboral de 8 horas (que se venía pidiendo desde la década de 1860), para sustituir el día laboral de 10, 12 y hasta 16 horas que prevalecía. La Federación declaró que la jornada de ocho horas entraría a efecto el 1º de mayo de 1886. En los meses previos a esa fecha miles de trabajadores, organizados e independientes, fueron puestos en alerta. Las fuerzas represoras policíacas y de la guardia nacional se prepararon para contrarrestar a los trabajadores, recibieron equipo y armas nuevas financiadas por poderosos líderes comerciales, que se oponían a las demandas laborales. Chicago fue el centro principal de la agitación.  

El primero de mayo de 1886

El primero de mayo de 1886, Albert Parsons, líder de la organización laboral “Caballeros del Trabajo de Chicago”, dirigió una manifestación de 80 mil trabajadores a través de las calles de Chicago, solicitando la reducción del horario laboral a ocho horas. En los siguientes días se unieron a esta demanda 350 mil trabajadores de toda la Unión Americana, que iniciaron una huelga que afectó más de mil fábricas. La unión de los trabajadores causó mucha alarma entre los industriales y en la prensa, pues vieron en las manifestaciones el inicio de una “revolución”.

Los anarquistas y otros radicales políticos creían que la reducción de jornada era una medida moderada y no quisieron involucrarse, pero el nivel de convocatoria que logró Albert Parsons convenció a los anarquistas de integrarse. El 3 de mayo August Spies, director de un periódico laborista, habló ante 6 mil trabajadores. El grupo de huelgistas se dirigió después a una fábrica cercana, la planta McCormick a manifestarse. Pronto llegó la policía, abrió fuego y mató por lo menos a un huelguista, hiriendo a muchos más.

La masacre de Haymarket

Los anarquistas convocaron a una reunión masiva en la noche del 4 de mayo de 1886 en el mercado de Haymarket, con el propósito de protestar por la brutal acción policiaca del día anterior. Spies, Parsons y Samuel Fielden fueron los oradores en Haymarket, ante de 2500 trabajadores. Cuando la manifestación estaba terminando, llegaron al lugar cerca de 200 policías. Mientras la policía pedía que se dispersara la reunión, alguien lanzó una bomba que mató a un policía. Se armó el alboroto y la policía comenzó a disparar, causando la muerte de siete policías y cuatro trabajadores, además de muchos heridos. No se supo nunca quién lanzó la bomba, pero ésto se tomó como pretexto para perseguir anarquistas y organizaciones laborales a lo largo del país. La policía saqueó hogares de trabajadores y arrestó a muchos de ellos. 

Los mártires de Chicago

El 21 de junio de 1886, ocho líderes laborales (Parsons, Spies, Fielden, Schwab, Fischer, Lingg, Engle y Nebee) fueron acusados de conspiración para asesinato por la bomba que mató al policía. El juicio, que condenó a siete de ellos a morir ahorcados y a uno a 15 años de cárcel, estuvo plagado de mentiras e incluso el fiscal llegó a pedir al jurado: “Castigue a estos hombres, haga un ejemplo de ellos, cuélguelos y salve nuestras instituciones”. El 11 de noviembre de 1886 fueron ahorcados Parsons, Spies, Fischer y Engel. Louise Lingg, anarquista, se suicidó en prisión y Fielden, Nebee y Schwab lograron conmutar la pena de muerte por cadena perpetua. Más de 200 mil personas asistieron a la procesión funeraria de los líderes muertos.  

El caso de Haymarket fue un escándalo internacional. El gobernador Oglesby recibió cientos de miles de cartas pidiéndole clemencia para los condenados, pero todo fue inútil: los condenados fueron ejecutados. La verdadera causa de su muerte no fue la explosión de la bomba, sino su capacidad para organizar a la clase obrera en demanda de mejoras laborales, con lo cual amenazaban los intereses de industriales y conservadores dentro del gobierno.

La barra de abogados de Chicago condenó el juicio y siete años después el Gobernador de Illinois, declaró la inocencia de los ocho acusados y liberó a los tres sobrevivientes. Se construyó un monumento para depositar los restos de los hombres juzgados y honrar su memoria. Más tarde los restos de otros líderes laborales, como Emma Goldman, Bill Hayward y Joe Hill, fueron depositados en el Monumento Haymarket en Chicago.

El 1º de mayo se declara el Día del Trabajo 

En 1889, durante el Primer Congreso de la Segunda Internacional Socialista, celebrado en París, se decidió que el 1º de mayo conmemoraría en adelante la solidaridad laboral. Desde entonces la mayoría de los países, especialmente aquellos de pasado o presente socialista, celebran ese día a sus trabajadores. 
Paradójica y significativamente, el 1º de mayo no se celebra en Estados Unidos ni en Canadá como Día del Trabajo, sino como Día de la Ley (Law Day). En esos países se otorgó a los trabajadores el primer lunes de septiembre, un día sin significado histórico, para celebrar su día (Labor Day).
La jornada laboral de ocho horas en Estados Unidos tuvo que esperar hasta 1935 para ser aprobada, durante la presidencia de Franklin D. Roosvelt.